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Realmente parecía un espejo |
PEREGRINO:
Que el cansancio del camino,
nunca te impida pensar.
¿Es lo importante la meta…?
¿No será acaso el encuentro con el
monte,
con el rio, con el rumbo que has perdido…,
con el mismo Dios quizás…?
Después
de un día estupendo, con un ratín de encuentro familiar, un tiempo espléndido,
casi con más calor que en Agosto pero sin agobios de gente en ningún sitio, de
vuelta ya hacia casa me encontré con este texto escrito en el lateral de una
Iglesia y me gustó tanto que lo copié.
Por esta zona se vive mucho el camino y está presente en muchos lugares, haciendo referencia a él de una manera o de otra
En
cierto modo era algo de lo que me había ocurrido a mí aquel día, hacía mucho que no me iba con el coche, esta vez tenía
destino fijo de ida pero a la vuelta sin límite de tiempo, me pude dedicar a explorar, que es lo que me gusta, y hasta descubrí una carretera con un
trozo con árboles tan cerrados que casi no dejaban pasar los rayos del sol, como eran muchas de las de antes, y más adelante pude disfrutar de un panorama que parecía
infinito
y donde el silencio casi hacía daño de lo profundo que era, me daba pena irme, quizás ese fue el momento de mi encuentro con Él,
con los árboles, con el monte y con el rio ya lo había hecho antes
y en cuanto al rumbo…
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...el camino seguía estando siempre ahí
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Aquel día de Septiembre, llegué
a casa contenta y feliz, lo había disfrutado plenamente;
durante todo el camino me fui encontrando con peregrinos, no dejan de pasar en
todo el año, y mentalmente les deseaba “Buen camino”, que es lo que
se suele decir cuando se está en él